0 Usuario(s)
39 Invitado(s)
1 Buscador(es):
Google
Record de invitados y usuarios en linea: 179
Se solicita al Ejecutivo Federal, gire instrucciones a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, para que rectifique la propuesta de lo que se pretende sean los términos de las nuevas reglas de operación del Procampo. - LIX Legislatura (Sep 2007 - Sep 2010)
ACUERDO # 83
LA HONORABLE QUINCUAGÉSIMA NOVENA LEGISLATURA DEL ESTADO LIBRE Y SOBERANO DE ZACATECAS.
RESULTADO PRIMERO.- En Sesión del Pleno de fecha 23 de septiembre de 2008, se dio lectura a la Iniciativa de Punto de Acuerdo que con fundamento en el artículo 60 fracción I de la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Zacatecas; 46 fracción I y 48 fracción III, de la Ley Orgánica del Poder Legislativo del Estado; 95 fracción I, 96 y 97 fracción III de su Reglamento General, presentaron los Diputados Mario Alberto Ramírez Rodríguez y José María González Nava.
RESULTADO SEGUNDO.- Por instrucciones del Presidente de la Mesa Directiva, mediante memorando número 367, de la misma fecha y de conformidad con lo establecido en el artículo 105 fracción II del Reglamento General del Poder Legislativo, la Iniciativa fue turnada a la Comisión Legislativa de Organización de Productores y Ramas de la Producción, dejando a su disposición el expediente relativo, para su análisis y dictamen.
Los Iniciantes del Punto de Acuerdo lo sustentaron en la siguiente:
E X P O S I C I Ó N D E M O T I V O S
“ PRIMERO.- El Programa de Apoyos Directos al Campo, Procampo, surgió en 1994 con el objetivo de apoyar a los productores agrícolas cuyos productos integraban el sistema de precios de garantía (maíz, fríjol, arroz, trigo, sorgo, cebada, soya, algodón y cártamo). Este programa surge como sustituto del programa de precios de garantía finalizado en 1989 e iniciado en 1953.
Las razones que dieron origen a este programa, en su mayoría, se han visto rebasadas, puesto que en la actualidad lo que el país necesita es un modelo bimodal, que sea congruente e integral, y que no caiga en la consideración de que la economía campesina es un ente pasivo y destinado a recibir únicamente apoyos, o desaparecer; sin ser lo suficientemente fuerte como para poder capitalizarse e incrementar el ingreso y empleo, al tiempo que se promueve el cambio tecnológico en una dirección agroecológica y apropiada socialmente.
SEGUNDO.- Nuestra realidad nos indica que gran parte de los productores, no solo del Estado de Zacatecas, sino de todo el país, dependen en su mayoría, del recurso proveniente de este programa Federal denominado Procampo, pues es mediante este subsidio, que aún y cuando es poco, extemporáneo y burocrático, ha constituido el único medio mediante el cual nuestros campesinos sortean la difícil tarea en que se han convertido las tierras de labranza; el campo mexicano año con año se ha convertido en una actividad incierta, con profundo abandono y carencia constante.
TERCERO.- El pasado martes 26 de agosto el Ejecutivo Federal a través del secretario de la Sagarpa ha hecho el anuncio lamentable de reducir entre un 20 y un 25 por ciento los apoyos de Procampo y a la comercialización, lo que afectará a la productividad nacional.
El titular de Secretaria de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación Federal, Alberto Cárdenas Jiménez, destapo ante legisladores de la comisión permanente, secretarios, organizaciones y productores, los ajustes, la propuesta de nuevas reglas de operación de la política del Procampo y el sistema de apoyos a la comercialización, que operara del 2009 al 2012.
Señalando de manera particular, más no clara y precisa, utilizando el engaño y la farsa para encubrir la realidad; que se afectarán los ingresos objetivos, coberturas, y la agricultura por contrato, así como la reducción del Procampo para aquellos productores que tienen más de 30 hectáreas, llegando a 463 pesos la hectárea, contra los 963 actuales, y los mil 100 que se subsidian en Estados Unidos.
Sólo se entregarán los apoyos una vez al año, y sólo para un ciclo, por lo que las entidades que tienen capacidad de sembrar en dos, no se verán beneficiados.
Sin embargo, hemos de destacar que existe también un argumento positivo, el cual consiste, en entregar más dinero a los propietarios con menos de 5 hectáreas, lo que resulta incongruente, es que esto sea a expensas de afectar al resto de los productores, con la reducción de los subsidios que a la fecha existen.
CUARTO.- Otra situación lastimosa, es que el ingreso objetivo, los apoyos a la comercialización, y los apoyos a la cobertura, se disminuirán, igual que los ingresos objetivos.
La Secretará de Agricultura Ganadería Pesca y Alimentación propone los precios, para el maíz blanco, a mil 900 pesos la tonelada, el trigo panificable a dos mil 565, el trigo duro a dos mil 90, el sorgo a mil 710, y el cártamo a cuatro mil 750.
De pagarse al precio que propone Sagarpa Federal, el ingreso de los productores sería en promedio de 12 mil pesos la hectárea, contra el costo de producción estimado en 15 mil pesos, luego que los insumos tendrán un incremento por el alto precio del petróleo, de tal forma que el amoniaco se venderá a partir de octubre, a ocho mil 845 peso la tonelada, el fertilizante granulado a 10 mil 500, que equivale a un aumento de 114 porciento; el fósforo granulado subirá un 138 porciento, hasta los 15 mil pesos; esta escalada de precios no corresponde con el índice inflacionario de cuatro por ciento estimado para este año.
QUINTO.- Con la propuesta hecha por el gobierno Federal 18 estados del país perderían ingresos, y 14 los ganarían pero sería muy poco, y en general, 30 entidades federativas perderán el doble ciclo agrícola, pese a la disponibilidad de agua para segundas siembras.
Con todo lo descrito, se daña a la productividad agrícola del país, en momentos en es que en necesario incrementarla para enfrentar la actual crisis alimentaria, por lo que los secretarios agrícolas, organizaciones y productores, han manifestado su rechazo unánime a la iniciativa de la Sagarpa, la cual está sin lugar a dudas atentando contra el campo mexicano.
SEXTO.- Para agravar el tema que nos ocupa las instituciones de crédito, como Financiera Rural y FIRA, únicamente ofrecerán a los productores, créditos por 13 mil pesos por hectárea para el cultivo, alrededor del 55 por ciento de la inversión total prevista en el cultivo.
Es decir, la situación no se plantea nada fácil, pues si ha esto se le suma la amenaza que mantiene el gobierno Federal en la propuesta para disminuir los apoyos federales al campo que realiza a través del Procampo, entonces la situación tiende a complicarse más.
SEPTIMO.- En ese orden de ideas, y oponiéndonos a que de esta manera se pretenda desarticular la producción agrícola en estados que juegan un papel determinante en la búsqueda de la soberanía alimentaria, como es el caso de Zacatecas, que aporta una elevada cantidad de granos a millones de mexicanos a nivel nacional.
No es posible que aparte de disminuir los apoyos del Procampo, el gobierno Federal pretenda supeditar estos estímulos a un solo ciclo agrícola, pues pretende coartar a los productores el justo derecho de aspirar a los dobles cultivos, además de que corta la justa aspiración que mantienen miles de productores que se encuentran fuera de este esquema de apoyos para que los incluyan en este programa Federal, situación que tampoco es justa.”
CONSIDERANDO ÚNICO.- En el México actual es prioritario transformar aquellos esquemas de apoyo a la actividad agropecuaria del país, buscando que los subsidios al campo contribuyan realmente a elevar la productividad, dando un mejor trato a los pequeños y a los medianos productores agrícolas y de esta manera garantizar nuestra soberanía alimentaria.
Debido a la crisis por la que atraviesa el campo mexicano, el Gobierno Federal se ve obligado a enfrentar con un enfoque diferente los problemas del campo; ha surgido en esta administración una visión, desde nuestro punto de vista inexacta para tratar de reactivar el campo mexicano.
El programa Procampo fue originalmente concebido como un complemento al ingreso campesino y no como un apoyo a la producción. Sus beneficiarios podían dejar de sembrar y recibir Procampo como pago por servicios ambientales. Fue con Francisco Labastida al frente de la Secretaría de Agricultura, durante el gobierno del Presidente Ernesto Zedillo, cuando se condicionó la entrega del subsidio a la siembra de la superficie beneficiada. De todos modos, la producción y la productividad agrícola siguieron aletargadas, los resultados productivos no corresponden al monto de los recursos canalizados por el programa, que es el de mayor presupuesto para el campo, lo que refleja que las políticas y cambios implementados para este programa no han funcionado, debido a que no se involucra, ni se toma en cuenta la opinión de quienes trabajan la tierra.
Debido a la situación tan precaria que vive el campesino mexicano, este programa que en sus 14 años de existencia no ha podido dar los resultados programados, sólo sirve para que los campesinos obligados a sembrar, manejen el recurso que utilizarían para capitalizar sus parcelas y predios, en comer, vestir y en el mejor de los casos, para mejorar la vivienda, gastos que consideran prioritario, a la opción de adquirir acervos tecnológicos.
Esta Soberanía popular considera que es importante relacionar la entrega del subsidio con mejoras en rendimientos y con prácticas ambientalmente sustentables, y diferenciar el monto del subsidio para aumentarlo a quienes posean menos de determinada superficie 10 o 30 hectáreas, o algo intermedio, pero sin reducir el apoyo a las unidades agrícolas mayores. Esto permitiría llevar mayores recursos a la pequeña y mediana agricultura, que es la que tiene menores superficies pero también, la de mayor potencial productivo desaprovechado.
Es substancial contemplar la visión de los gobiernos de los estados donde la agricultura se desarrolla en grandes extensiones, como Tamaulipas, Sinaloa, Sonora, Chihuahua y Zacatecas, advierten que la situación del campo puede empeorar si se les reduce el Procampo. En el resto del país podrán decir lo mismo por el hecho de que el 50 % del total de los beneficiarios de Procampo que cuentan cada uno con menos de 2 hectáreas recibe sólo el 13 % del total de los apoyos debido a que cuentan con poca tierra, mientras que el 3.8 % de los productores, los que tienen más de 18 hectáreas reciben, el 33.2 % del recurso y tan sólo 3.8% de los productores que reciben Procampo cuentan con más de 18 hectáreas cada uno y captan el 33.2% del recurso. Si de lo que se trata es que el Procampo sea más equitativo y que su entrega esté condicionada a mejoras tecnológicas y de sustentabilidad ambiental, el programa debe verse como parte de una estrategia que cubra otros objetivos complementarios. Como el dotar a la pequeña y mediana agricultura de los dos elementos que hacen la diferencia entre el atraso y el progreso en el campo: infraestructura de riego y servicios financieros. Claro que esos son los elementos en la cúspide, debajo de los cuales hay investigación y transferencia tecnológica, adquisición de activos, infraestructura de almacenamiento y organizaciones democráticamente constituidas de productores, contexto que por desgracia aún no se logra en México.
El Pleno de este Poder Legislativo, concuerda en que por las condiciones actuales del País se hacen necesario una reestructuración real del programa pues el presupuesto para Procampo en 2007 fue de 16 mil 36 millones de pesos; para 2008, de 16 mil 678 millones, y el propuesto para 2009 se mantiene en la misma cantidad que el del año en curso, lo que representa una disminución de 6.5 por ciento en términos reales, y esto a todas luces no abona a la transformación que el campo mexicano requiere.
Es prioridad que el apoyo se dé a todos los productores en reconocimiento a su participación en la soberanía alimentaria, ya que en la actualidad existe discriminación en su entrega y eso es lo que se debe combatir, el padrón de beneficiarios debe abrirse con el fin de que se puedan incorporar, en primer término, campesinos e indígenas de zonas de temporal.
La reforma en mención requiere de un análisis justo, pues los campesinos del país demandan que se incremente la cuota del nuevo Procampo a los productores con superficies menores, se otorgue oportunamente y haciendo la diferenciación de los ciclos agrícolas, pues de lo contrario se estaría en contra de la soberanía nacional alimentaria.
Las cifras dan cuenta del problema agrícola de México: en los últimos 15 años hemos aumentado nuestra dependencia alimentaria, al pasar de 19 a casi 40 por ciento. Cuatro de cada diez granos consumidos aquí provienen del exterior.
El sector productivo se encuentra pulverizado, poco organizado y carente de los elementos necesarios para almacenar, conservar, transportar y financiar adecuadamente la comercialización de sus cosechas. Hoy en día, el tema se ha convertido en un asunto de seguridad nacional y así lo debemos entender quienes tenemos en nuestras manos proponer soluciones y poner al alcance de los pequeños y de los medianos productores, las herramientas necesarias para afrontar los nuevos retos que nos ha dejado la más reciente crisis.
Por lo anteriormente expuesto y con fundamento además en los artículos 105 y relativos del Reglamento General del Poder Legislativo del Estado, es de acordarse y se acuerda:
ÚNICO.- Esta Quincuagésima Novena Legislatura del Estado de Zacatecas, solicita respetuosamente al Ejecutivo Federal, gire instrucciones a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, para que rectifique la propuesta de lo que se pretende sean los términos de las nuevas reglas de operación del Procampo que operarán del 2009 al 2012, donde se intenta reducir los apoyos al subsidio del Procampo y a la comercialización, de los productores agropecuarios del país; apegándose a las necesidades que vive el campo mexicano.
Dado en la Sala de Sesiones de la Quincuagésima Novena Legislatura del Estado, a los doce días del mes de noviembre del año dos mil ocho.
PRESIDENTE
DIP. FELIX VÁZQUEZ ACUÑA
SECRETARIO
DIP. JORGE LUIS RINCÓN GÓMEZ
SECRETARIO
DIP. LUIS RIGOBERTO CASTAÑEDA ESPINOSA
"El contenido que maneja esta página es sólo de carácter informativo, por lo que carece de validez legal"
DERECHOS RESERVADOS 2008-2010 Poder Legislativo del Estado de Zacatecas Fernando Villalpando y San Agustín SN, Zona Centro, CP 98000